Cómo Ahorrar Aceite en la Cocina

El Aceite es un producto esencial en la cocina que se usa en prácticamente todo el mundo a diario, por lo que no es mala idea conocer una serie de trucos para poder ahorrar un poco de este valioso y en ocasiones caro producto (dependerá del Aceite que uses y de la oferta/demanda, como todo) para que así nos dure más y por ende mejore un poco nuestra economía (que toda ayuda siempre es buena, ¿no?).

En este post te traigo unos cuántos trucos que uso yo para ahorrar Aceite en mi casa, son consejos generales para todos los aceites (de oliva, girasol, sésamo, soja…), así que independientemente de cuáles uses tú, te servirán.

Ya te digo que hay un poco de todo, algunos son pequeñas acciones que a largo plazo si que darán sus resultados mientras que otros conllevan ciertos posibles cambios en tu forma de usarlo que pueden mejorar muchísimo tu capacidad de ahorro de Aceite. ¡Tu aplica los que en tu caso te vengan bien!

Usa un Pulverizador de Aceite

Este es sin duda uno de los puntos en los que yo más he notado una gran diferencia y la verdad es que debo decir que todo el mundo debería usarlos. Ya sabes a qué me refiero ¿no? yo en casa siempre les he llamado los «flus-flus», pero vamos, que son esos «aspersores» que se utilizan muchas veces en productos de limpieza.

Estos aparatos nos permiten ahorrar muchísimo aceite porque expulsan poca cantidad de aceite cada vez que presiones la «palanquita» y porque al pulverizarlo es como que el aceite queda más bien repartido y cunde más (no se te quedan las típicas gotas gordas esas por ahí corriendo).

Además nos evitan tener que vivir esa grata experiencia que seguramente todo el que esté leyendo este post habrá vivido en algún momento, que es la de que de golpe se te abra el tapón de la botella de aceite más de la cuenta y caiga tremendo «chorretón»… da mucha rabia cuando pasa eso, pero usando el difusor pues te olvidas.

Usa un Air Fryer

Creo que a nadie le sorprenderá en absoluto la afirmación de que donde más Aceite desperdiciamos es cuando hacemos fritos. Obviamente no sería mala idea, por temas de salud (y de ahorro) no consumir productos fritos o al menos reducirlos, pero bueno… al menos en mi caso veo bastante complicado no usarlos en ocasiones porque te facilitan bastante la vida, por lo que al menos podemos reducir al máximo el gasto de aceite cuando recurramos a ellos (que así también es más sano).

Aquí es donde entra el todopoderoso Air Fryer, un producto que seguramente conozcas (si es que no lo tienes ya) porque en los últimos años tuvo un gran boom de popularidad. Se trata de freidoras que funcionan con aire; al final tienen un funcionamiento similar al de un horno, pero son más prácticas para productos que queramos freír (que no es lo mismo que hornear).

No es como que no vayas a usar Aceite porque lo suyo es añadir un poquito de aceite sobre lo que quieras freír (idealmente hazlo con tu flamante difusor de Aceite) para darle un poco de «saborcito» a aceite y ayudar a que se fría mejor, pero la cantidad de Aceite utilizado en comparación a la fritura estándar de toda la vida (ya sabes, cubrir toda una sartén con una cantidad MUY considerable de Aceite) es ínfima.

Te recomiendo muchísimo que adquieras uno (hay de muchos precios, algunos muy asequibles) como una inversión porque te aseguro que a largo plazo vas a amortizar lo que te gastes en él a base de ahorrar Aceite. En mi caso, creo que es una de las mejoras compras que he hecho.

Usa Sartenes Antiadherentes

Dejamos a los fritos de lado y vamos de lleno con los salteados y productos «a la plancha». Para este tipo de cocciones no requerimos de tanto Aceite como en el caso de los fritos, pero es cierto que si no contamos con las sartenes adecuadas… gastaremos bastante más Aceite de la cuenta.

Las Sartenes Antiadherentes (las típicas parrillas o «sartenes parrilla» también vienen fenomenal) son muy recomendables porque evitan que nuestra comida se pegue mientras la cocinamos sin la necesidad de tener que usar casi nada de Aceite (con unas pocas gotitas o un «flus» del Pulverizador tiras sobradamente) y además de eso, la verdad es que nos facilitan mucho la vida porque es bastante molesto cuando la comida se empieza a pegar a la sartén (cómo odio eso).

Así que en fin, lo dicho, otro producto muy recomendado para ahorrar Aceite… pero eso así, asegúrate de cuidar bien tus Sartenes Antiadherentes porque lo último que quieres es que vayan perdiendo su capa antiadherente ya que cuando eso ocurra (o cuando acabes de los nervios porque la comida se te pegue) tendrás que comprar una nueva.

Reutiliza el Aceite Usado

Volvemos de nuevo con los fritos en un truco que seguramente conozca ya todo el mundo, pero que yo lo mencionaré igual por si hay algún despistado por ahí.

El caso, que cuando frías algo puedes guardar ese aceite usado y reutilizarlo. Suena un poco a algo no demasiado… higiénico, bueno no es que lo sea, pero la verdad es que es algo que hace prácticamente todo el mundo (hasta los restaurantes) y que si se hace de la forma debida no te causará ningún problema.

Lo que tienes que hacer con el Aceite que te sobre es lo siguiente:

  1. Cuelas el Aceite: Si lo usas para freír patatas no hará falta porque no quedará prácticamente ningún residuo (si queda alguna cosita como algún pedazo de patata «churruscado» pues lo quitas fácilmente con algún utensilio de cocina), pero para las cosas que sí dejan residuo (especialmente los rebozados) es lo suyo porque en fin, es un residuo a fin de cuentas y no quieres que se añada al próximo frito que hagas. Usa un colador para ello, no tiene mucho misterio. Y si fríes pescado mejor tíralo a no ser que vayas a usarlo solo para freír pescado o lo que cocines sabrá a pescado y eso no es demasiado agradable.
  2. Guardas el Aceite: Puedes usar un bol, un vaso o algún tipo de recipiente de cristal (de plástico no porque si añades el Aceite caliente podrías llegar a fundirlo un poco y mala idea) para ello. Cuando lo hayas llenado lo dejas a temperatura ambiente, que es Aceite y no le pasará nada.

Obviamente no te va a durar para toda la vida este Aceite, tras 3 o 4 usos deberías tirarlo por salud y por higiene, pero basta decir que ahorrarás mucho Aceite con este sistema. Por si no sabes cuál es el momento ideal para tirarlo, bueno… a ojo se puede intuir, pero si cuando fríes un alimento comienza a salir como «espumita»… pues ya acabas de freír lo que estés friendo pero tras ese uso ya lo tiras.

Y estos serían todos los trucos, hay más cosas que podrías llegar a hacer, pero estos son los que yo uso a diario y que a mí personalmente me funcionan muy bien. Hay otros métodos, pero como no los he probado pues no puedo hablar sobre ellos. ¿Qué otros trucos usas tú? ¡Comparte tu sabiduría en los comentarios!

Ala, ¡hasta otra Armoniosos y Armoniosas!

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